sábado, 11 de septiembre de 2010

Calma

Si acaso en un minuto viniera alguien especial desde la muchedumbre y se lanzara a mis brazos, como si esperara una ventisca húmeda que refresque mi cuerpo, o algún viento sucio con sonrisa falsa y manos ensangrentadas .Que pase por mi lado viendo así su máscara de piel y huesos. O si sólo espero ese minuto para sentir como el tiempo recorre mis pliegues, mis pelos, esos nuevos tejidos que genero minuto a minuto. Para que luego tú, los toques y recorras como cuando le sacas la miga al pan y haces esas figuritas que tanto me gustan.